Son muchos los pacientes que padecen este tipo de problema y que acuden a nuestra consultas preocupados por el avance de esta.
El diagnóstico se realiza mediante la exploración física y la Tricoscopia (una técnica en la que visualizamos el cuero cabelludo y el pelo a mayor aumento y donde se observan signos que nos indican ante qué tipo de alopecia nos encontramos).
Es muy importante que su diagnóstico sea realizado por expertos, porque del éxito del tratamiento depende de un buen diagnóstico. Y es que no son pocos los pacientes que nos encontramos, que han sido diagnosticados de alopecia androgénica, y en los que fracasa un trasplante de pelo, por un mal diagnóstico.
Lo primero que hay que saber es que el tratamiento que debemos realizar será un tratamiento continuado en el tiempo, que a veces requiere de la realización de un trasplante capilar.
Lo segundo y más importante es que todos los tratamientos deben ser individualizados y adaptados a las necesidades y la alopecia del paciente.
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